...Y cuando
abro mis ojos me doy cuenta que entré en un estado de catalepsia psíquica, un
padecimiento que según lluvia de cristal, adormecía su cuerpo, lo dejaba
casi sin conciencia, sin fuerzas para decidir. En el fondo solo se oía
una voz que decía: "No te alejes de quien te levantó, no te alejes y
agradece lo que eres; pues sin mí no serías nada", dijo mía. Pues he
despertado he salido de mi coma inconsciente y estoy aquí contando, una vez más
mi triste y patética historia. Cuando creí haber perdido todo, cuando creí que
ya no volvería a mi mundo, cuando creí que sería la obesa de siempre; algo muy
en el fondo de mí ser débil me iluminó, no sé cómo explicarlo, dicha fuerza
latía furiosamente, deseando que la alcance y yo por otro lado conseguí abrir
mis tenues ojos que me mostraron la realidad. He dicho basta muchas veces pero
nunca he estado tan segura de mis acciones, porque las he podido demostrar,
demostrar que aún mantengo mi fuerza de voluntad que hace mucho descuidé. La
verdad he luchado mucho por recuperar al ser que fui antes, nunca me había
sentido tan bien, pues cuando me subí a la balanza vi que los números
disminuían, “he bajado de peso” lo dije emocionada y lo he logrado después de
un largo estancamiento. Jamás creí volver a sentir a esa lluvia de cristal
audaz y enérgica pues me sentía como en los viejos tiempos; recostada mirando
la televisión, bebiendo agua por do quier, evitando la comida al 100%, fumando
como una locomotora, durmiendo con el estómago vacío. Me he recuperado y cada
vez lo estoy logrando, estoy saliendo de la propia tumba que cabe y en la cual
yacía perdidamente derrotada, porque mi supuesta voluntad no se esfumó, se tomó
un receso para concientizar mis actos, tuve que llegar al límite para comprender
lo que realmente quiero ser y de seguro que ser gorda no es una opción...!!
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